viernes, 31 de agosto de 2012

La Colección "Cosmópolis", de Editorial Pre-Textos


No conocía la colección Cosmópolis que publica la Editorial Pre-Textos y que ya ha superado los diez primeros títulos. Supe de su existencia casi por azar, a muchos pies de altura, en plena travesía de Europa a la vuelta de unos días pasados en la capital alemana. "Berlín" era precisamente el libro que una compañera de a bordo en el vuelo iba leyendo, y con cierta dificultad, sin caer en una excesiva indiscreción, pude atisbar desde mi asiento el nombre del autor y la editorial, para luego poder buscarlo en mi librería habitual. Parecía oportuno prolongar ese idilio con una ciudad que ya formaba parte del recuerdo pero aún muy viva y fresca en las imágenes, en los olores, en los sabores, esta vez a través de la literatura. No había sido nunca muy proclive a leer libros de viajes, pero ahora, los escenarios que otro podía haber construido partiendo de los mismos lugares que pocos días antes había recorrido yo mismo, sus experiencias e impresiones, me atraían vivamente. No me fue fácil conseguir el libro, y al abrirlo, descubro con satisfacción el acierto de aquel pálpito en medio de los cielos. Un Berlín como un puzzle ensamblado en virtud de treinta relatos breves, de no más de dos o tres páginas cada uno, y aderezado con sorprendentes fotografías, donde la palabra de Ales Steger, el viajero esloveno que surca los rincones y la cotidianeidad de la ciudad, se encarama con solvencia hasta el punto de ofrecer una visión de ella que me hace añorar más si cabe no haber podido conocerla mejor, escrutar sus peculiares señas de identidad marcadas a fuego a lomos de la Historia. Evocadora pues la forma en que Steger recorre Berlín y se alía con las armas de la lírica para dejarnos una semblanza inolvidable de sus lugares, de sus gentes. Me parece escuchar todavía a lo lejos el ronronear de los tranvías y el trasiego humano por los pasillos de la estación de Friedrichstrasse.






Al cerrar el libro, en la solapa de contraportada, descubro los once títulos que hasta ahora integran la colección Cosmópolis. Se me van los ojos al número 5, París, otra ciudad que no por haberla visitado varias veces dejará de atraerme con su especial influjo. No me queda lejos la librería El Buscón, y ya estoy en camino para decirle a Antonio que me lo pida.


domingo, 26 de agosto de 2012

Lo que viene

Bueno, habrá que animarse. La verdad es que el verano cercena el lado más frágil de uno, asaltándole de incertidumbres. En todo caso, ya estamos manos a la obra con nuestros nuevos proyectos. Mi famosa antología, que tanto trabajo me está dando, con el difícil rescate de palabras y sentimientos archivados desde hace tiempo en el erial de la memoria. Parece que toma forma, como los poemas de nuevo cuño que contra viento y marea van asomándose al papel.

Por otra parte, también la Asociación Cultural Norbanova viene cargada de novedades para este próximo cuatrimestre. De momento, el día 28 de septiembre, viernes, presentaremos en el Salón de Actos del Palacio de la Isla, a partir de las 20:00 horas, el número 2 de la Colección de Ensayo: "Y Dios creó el cine. El universo de Joao César Monteiro", con participación de su autora, Angélica García Manso, y del escritor y crítico cinematográfico Enrique Pérez Romero. En breve tendremos los carteles y las invitaciones.

Pero la mayor novedad que preparamos para estos meses será el estreno de una actividad que buscábamos hace tiempo poner en marcha y que hemos denominado "Aula de la Palabra". En ella tendrán cabida múltiples facetas de la cultura, desde la exposición de la obra de un autor hasta la organización de debates o conferencias sobre cualquier materia.  Habrá que esperar a octubre para inaugurar esta "Aula de la palabra" y se encargará de ello el poeta José María Jurado, sevillano, de ascendencia cacereña, que ya coloboró en Norbania 2, y que ofrecerá una lectura de sus versos, habiéndose solicitado el auditorio de la Biblioteca Pública de Cáceres para tal evento, el viernes 26 de octubre. Pero no todo será poesía. Otros ámbitos del conocimiento, como el cine, la gastronomía, estarán presentes antes de que acabe el año entre nosotros. Entonces será el turno de Norbania 3 y de la literatura infantil, aunque en medio se dará continuidad a la colección "Baúl de Palabras".




Con esta letra capital empezará el nuevo libro que se prepara en la Colección de Literatura Infantil.


miércoles, 22 de agosto de 2012

Lecturas e introversiones

No lo sé, pero mientras leo "Aire de Dylan", de Enrique Vila-Matas, me siento más identificado con todo lo que en la novela se dice sobre el fracaso y su inseparable maridaje con la literatura. Al principio, uno venía encontrándose a gusto con lo que a ratos perdidos escribía, pero desde hace un tiempo, una parte importante de ese placer ha terminado derivando en un enjambre de dudas, en una ansiedad de preguntas sin respuesta, con la convicción cada vez mayor de que no podrá liberarse de ese regusto de incómoda mediocridad que parece envolverlo todo. A estas alturas, y después de casi treinta años de aquel primer libro de gestación puramente escolar, los kilómetros recorridos, la génesis casi constante de material que en gran medida permanece inédito, te suscitan muchos interrogantes. Ahí quedó un proyecto de antología que al menos pudiera actualizar una producción poética ininterrumpida desde los años ochenta, e incluso algún libro premiado que nunca vio la luz. Uno se ve acosado por sus propios fantasmas. Como diría Sergio Chejfec, citado por Vila Matas, "el fracaso es la prefiguración natural del destino del escritor". Quizá tenga razón.

martes, 14 de agosto de 2012

Cine y Literatura: Reinventando el mito.


Desde siempre, cine y literatura han estado íntimamente relacionados. Un buen libro que luego se convierte en película, aunque el proceso resulte algunas veces decepcionante, un guión verdaderamente original que permita construir una historia sólida, que con una buena dosis de acierto y puesta en escena, así como ese mínimo de suerte siempre necesario, termina incluso forjando un mito. Imágenes con referencias literarias, sagas que surgen de la nada y se reinventan continuamente, no siempre con las mismas coordenadas y las mismas claves que acaso un día funcionaron. El verano es hábil para rediseñar secuencias, para descubrir personajes y tomar nota de ideas y frases, para investigar nuevos sonidos y nuevas coreografías. El cine y los libros ayudan mucho a ello, abren la puerta a esos mundos que aguardan ser visitados.  Un primer ejemplo de ese maridaje nos condujo a la deliciosa novela "La delicadeza", de David Foenkinos, publicada en España por Seix Barral, y llevada al cine bajo la dirección del propio autor y de su hermano Stéphane Foenkinos, con reparto encabezado por la no menos encantadora Audrey Tautou, la inolvidable Amélie, cuya sensibilidad se reedita en esta nueva historia, en la que hay mucho de amor, pero también de ternura, de sentimiento y esperanza después de una desgracia personal.




Radicalmente distinta, la también recién estrenada Prometheus, quizá solivianta a quienes buscaran una reedición del mito de Alien, el octavo pasajero, o acaso una teoría razonablemente sostenible en la que apoyar el origen de aquella exitosa historia con la que Ridley Scott revolucionara el cine de ciencia ficción y de terror allá por 1979. Ya decíamos que no siempre la reinvención de los mitos responde a lo esperado y menos cuando lo que se plantea obedece a argumentos y propuestas no necesariamente coincidentes con el original. Como en Gladiator, Ridley Scott tiñe todo el filme de una atmósfera trascendente y existencial de la que carecía el Alien de finales de los setenta. Aquí se trata de indagar, de obtener respuestas, y el resultado, aunque brillante técnica y visualmente, con escenas realmente impactantes, termina en un océano de preguntas cuya explicación difícilmente obtiene el espectador, sumido en medio de un deslumbrante escenario futurista donde el hombre continúa siendo un ser débil y frágil que busca su sentido en el cosmos aunque ello pudiera costarle su propia aniquilación. Después de ver Prometheus, la tentación de navegar de nuevo a bordo de la Nostromo nos lleva a adivinar las coincidencias que pudieran existir entre ambas películas; la más significativa, la dicotomía entre el personaje femenino protagonista (en Alien, el encarnado por Sigourney Weaver, la célebre Ripley, y en Prometheus, el que interpreta Noomi Rapace), y el androide, en los dos filmes certero, implacable y programado. Pero también está la criatura, sin duda mucho más relevante en la primera que en esta precuela, donde el director se pierde en una suerte de referencias simbólicas y arqueológicas que recuerdan las propuestas de Erich Von Daniken sobre la hipótesis de un creacionismo extraterrestre. Prescindible a nuestro entender el personaje encarnado por Charlize Theron, cuyo sentido no acabamos de captar más allá de lo que supone el reclamo de una actriz de renombre y físico inapelable. 





Después de tanto comecocos, lo mejor es pasar un buen rato y desintoxicar la mente con propuestas como la de Brave, de la factoría Disney Pixar, cine de consumo pero de impecable factura con una historia divertida, idónea para estos días en los que se trata de desconectar de lo cotidiano. Y con una princesa de nombre extremeño, Mérida, pero ascendencia escocesa. 



sábado, 4 de agosto de 2012

De vacaciones.

Las vacaciones son tiempo de desajuste, un desajuste sin duda agradable, pero que rompe del todo los esquemas cotidianos. La distancia, la diversidad, los espacios en blanco, contribuyen a ello. Los meses que se avecinan serán sin duda duros, vendrán cuesta arriba en muchos aspectos y se hace necesario recargar fuerzas, hacer acopio de buenos momentos que ayuden a paliar la tormenta que viene de camino. Nada mejor que poner tierra de por medio. Reencontrarse con los escenarios donde surgió la inspiración y escrutar otros que poder vestir con el artificio de las palabras. Descubrir que más allá de la orilla del mar donde Caspar David Friedrich situara su solitario monje, apenas a unos metros, en la misma galería, otro pintor sugería un escenario muy distinto, Carl Blechen, con su "A Monk in a rocky setting". Los contrastes, violentos casi algunas veces, nos rodean.



Esta noche, en la localidad de Mata de Alcántara, varios compañeros y colaboradores, que han participado en las publicaciones de Norbanova, ofrecerán una velada literaria, y aunque no podremos acompañarles físicamente, sí estarermos con ellos a través de la revista Norbania, en la que casi todos los que hoy intervienen han tomado parte con sus creaciones. Mucha suerte pues a amigos como Víctor Manuel Jiménez, Vicente Rodríguez, Puri Claver, María S. Durán, Francisco Bermejo y Nicolás Corraliza, inmunes al desaliento, que aliados con el fulgor de la palabra, seguro que harán pasar un buen rato a los asistentes.

En estos días, cuando la Asociación también ha relajado sus actividades y mira con preocupación su propio futuro, lo mejor parece ser refugiarse en un libro y acomodarse al amparo de una buena selección musical. Aunque la ilusión permanece intacta, no es posible ignorar que la convulsa situación que vivimos sin duda alguna tendrá su reflejo en la continuidad de muchos proyectos que tal vez ya no puedan abordarse. De momento, en septiembre se presentará el anunciado segundo título de la Colección de Ensayo, y Norbania 2 seguirá su andadura con alguna nueva e improvisada puesta en escena, todavía no concretada. El tándem Pilar López y Deli Cornejo sigue preparando su nuevo libro infantil sobre las andanzas de la cocinera Pringosona Rodríguez, y esperan tenerlo listo para finales de año. Se trata de uno de los proyectos más ambiciosos de la Sección Editorial y anticipamos que no dejará indiferente a nadie, especialmente a los más pequeños, a quienes enseñará buenos hábitos alimenticios.



Una publicación de Norbanova, en "La Industrial", esta semana

Después de nuestro paso por EDITA Nómada Cáceres 2024 y la tarde de "desaforismos" con Félix José Ortiz, el pasado día 7, en el Au...