Crónica de la presentación de Norbania 8: "La ciudad que queremos".

Mañana entreverada de nubes y destellos de sol en el ecuador de febrero. Redentora luz, faro al final del camino tras una travesía de incertidumbres. Acogedor enclave donde el tiempo y la historia confluyen en su mestizaje. Próxima la humedad del agua en los aljibes, las voces que susurran, la savia del mito. ¡Qué mejor lugar para reflexionar sobre nuestra ciudad, para vivir una jornada de cultura y creación! Llevábamos meses aguardando el momento idóneo para poder presentar este número especial de la Revista Norbania, La ciudad que queremos, que tanto esfuerzo nos había costado poner en pie. Después del acto que compartimos ayer, estamos seguros de haber acertado en cuanto al sitio, la fecha y el contenido. Celebramos así habernos impregnado de todo ese acervo histórico e ingente mosaico de culturas que conviven en el emblemático Museo de Cáceres, ubicado en el Palacio de las Veletas, cuyos jardines sirvieron de escenario para esta largamente esperada presentación. Aunque se trataba del número correspondiente a 2021, también la fecha del evento encontraba su sentido como pórtico de las conmemoraciones del decimoquinto aniversario de la Asociación Cultural Norbanova, que recordaremos a lo largo de todo este año 2022. Porque nuestra asociación nació vinculada a Cáceres y para Cáceres y tal era la inspiración del libro que esa soleada mañana de sábado mostrábamos por fin en público, dando voz a cuantos colaboradores quisieron tomar la palabra. Con la asistencia de varios representantes municipales y personas pertenecientes a diversos colectivos culturales y ciudadanos, escritores y escritoras, artistas, gente del teatro, de la universidad, etc., se escucharon desde esa privilegiada atalaya alzada sobre las huertas cacereñas y la Ribera del Marco, con el telón de fondo de la Sierra de la Mosca, múltiples propuestas y formas de interpretar nuestra ciudad, la visión de futuro de quienes bien la conocen en sus respectivos campos (urbanismo, ecología, turismo, desarrollo sostenible, recursos económicos y empleo, etc.). La preocupación por temas como la rehabilitación del corredor verde de la Ribera del Marco ocupó un lugar destacado en las intervenciones; y es que no en vano desde la Asociación Cultural Norbanova quisimos unirnos a tan necesario objetivo destinando una parte de las ventas de este número de Norbania a  la Asociación de amigos de la Ribera, con el fin de contribuir en la medida de nuestras posibilidades a la labor de reforestación y limpieza de este espacio. No faltaron tampoco los autores y autoras, que dejaron muestra de sus creaciones con la lectura de poemas y fragmentos de sus relatos. Y por supuesto, todo ello se vio aderezado y bendecido con la caricia de la música, a través de la extraordinaria actuación del grupo cacereño Dalmatians, que forman Lete, Nuria, Myriam y Ramón, quienes nos deleitaron con la interpretación de varios temas en propuesta inclusiva (lengua de signos española), permitiendo con sus canciones que el acto fuera más ágil y ameno, a la vez que haciendo las delicias del público. También destacó la joven voz Miriam, que junto a la guitarra de Lete ofreció su particular versión del tema "My inmortal", del grupo Evanescence. Agradece enormemente la Asociación Cultural Norbanova la gentileza y disposición de los integrantes de Dalmatians, que quisieron acompañarnos en este acto tan importante para nosotros y cuya profesionalidad y buen hacer es obligado reseñar y difundir. Haber vivido y compartido esta experiencia con tantos amigos es algo realmente indescriptible. Una satisfacción que nos permite seguir alumbrando ilusiones de cara al futuro, ahora que hemos cumplido nuestros primeros quince años como editorial y promotora cultural independiente. Mil gracias por tanto, a todos y todas. 

Las fotografías que ilustran esta crónica han sido realizadas por la fotógrafa cacereña Miriam A. Gómez Cornejo, también maquetadora y responsable gráfica de Norbania 8 junto a la ilustradora Deli Cornejo (La lente y el pincel).